martes, 18 de enero de 2011

Cuando Lon Chaney jugó con la muerte al ajedrez

Dejarlo todo sería la opción más eficiente. La más elegante. Dejarlo todo, llamar yo a su puerta y decirle que se ha acabado el espectáculo, que Faemino y Cansado ya no están en el escenario, que Chip y Chop murieron hace tiempo. Ni siquiera perduran aún los vagos recuerdos del gordo y el flaco. Sólo queda un triste Lon Chaney que ya se ha cansado hasta de liberar leones. Un Lon Chaney que se quita el maquillaje lentamente en el camerino, que olvida que no quiere recibir la bofetada, ya ni siquiera éso le importa.
Así podría describirme en estos momento. Ya he dicho que dejarlo todo sería la opción óptima, por hastío. Cansancio de todo. Nada de esto va a llevar a ningun sitio y, finalmente lo mejor sería dejarlo estar, let it be, como dirían los Beatles. Cansado de reír y llorar. Soy como el Comediante, llevo un pin con una cara sonriente mientras carbonizo con napalm a algunos amarillos en El Puto Vietnam
El negativismo se me hace denso, no puedo pensar, ni llorar, ni vomitar. Hace años que no vomito, creo que querría vomitar un rato.
Todo esto suena a suicidio, pero no lo es. Bueno, quizás, sí, un suicidio intelectual. Todo esto es resultado de la visión un tanto histriónica de varios acontecimientos acaecidos recientemente. Debería estar estudiando ahora mismo, debería desollarme los codos ¡Joder! Pero no lo hago, porque eso no me va a llevar a ningún sitio. Es una carretera perdida hacia ninguna parte, diseñada por un esquizofrénico llamado Frank que vive en Baltimoore. Hay tantos fallos que el mero hecho de esforzarme por superar el cinco me parece un juego estúpido, como aquel hipopótamo tragabolas de nuestra infancia. Eso sí, estudiar no es divertido (aprender sí, ojo)
sólo os pido que lo entendáis, que no me lo volváis a reprochar nunca jamás. Porque no lo voy a hacer. Sólo quiero correr un rato desnudo por el bosque.
En ralidad ni siquiera quiero hacer eso.
¿Entonces qué? No sabes nada, tus gorduras delatan tu estúpida mente. No eres nadie, nunca escribirás nada bueno, nunca serás quien quieres ser, nunca tendrás gracia. Hace tiempo lloré creo por estas palabras. Ahora no puedo hacerlo, no puedo hacer ni eso. Hace tiempo escuché una canción en la que se exponía con una rara y monótona voz que, aunque sea una lata el trabajar, tiene la vida su parte buena ya que, gracias a Dios, ésta pasa felizmente si hay amor, si hay amor, si hay amor. Bien, señoras y señores. No lo hay, y lo peor, no lo habrá. Y ahí es cuando, de repente, descubre que no eres nadie, que nada hubiera cambiado de no haber nacido, que eres un simple peón jugando contra la muerte en el Séptimo Sello. No me voy a suicidar, ni siquiera intelectualmente. Mañana volveré a estudiar, como hoy, como anteayer, como lo haré pasado mañana, y al siguiente día, y al siguiente y al siguiente. Aunque siga pensando que todo esto no tiene sentido, y que estudiar para algo que no tiene sentido lo tiene menos aún.

5 comentarios:

  1. pedazo de blog! me encanta sobretodo la foto de la pelicula fantasia! Un beso mi blog es http://1001sonrisasxa1000lagrimas.blogspot.com/ me encantaria que te pasaras :)

    ResponderEliminar
  2. nunca dejes de hacer lo que realmente quieras hacer, nunca. Dejar las cosas por que parezcan duras o difíciles NUNCA es la solución..por que todo se puede tener y conseguir si uno quiere de verdad..
    animo con lo que acontezca!
    :)

    ResponderEliminar
  3. que tipo e blog es este? :/
    Igual me agrada, te sigo

    ResponderEliminar
  4. TE SIGO, PASATE POR MI BLOG, COMENTA CON TU OPINIÓN, Y SI TE GUSTA, SÍGUEME!

    ResponderEliminar
  5. Buf, te pegó fuerte la depre. He de recordar que será una lata el trabajar, pero todo es más divertido cuando a tu madre se le escapan las gallinas del corral (xD).
    Y que para matar mujeres y niños amarillos, sólo hay que apuntar un poco mejor (La chaqueta metálica).
    Si no hay esperanza, no hay vida. Porque, si te paras a pensarlo, ¿qué logramos viviendo? Y sí, ya sé que esto suena a secta suicida de Texas, pero creo que es la realidad. ¿Para qué estudiar? ¿Para qué trabajar? ¿Para qué vivir, llegados al caso? Pues yo no sé tú, pero yo por lo menos tengo la esperanza de poder mejorar un poco este mundo de mierda que me ha tocado vivir. Porque si no tiras pa'lante, si no tienes esperanza, ¿quién lo va a hacer? Si tiras la toalla significa que la sociedad te ha ganado. Y eso nunca, antes muerto que en sociedad (ay que sencilla, ay que sencilla...xDD).
    Grita (yo por lo menos lo hago) "mundo cabrón, iré a por ti como Peter fue a por ese entrenador de hockey".

    ResponderEliminar